miércoles, 25 de febrero de 2015



“Entre más contenta mantengas a la vaca, más leche te da.” Este es un dicho muy conocido en muchos campos de América Latina. Se dice que muchos granjeros tienen por costumbre tratar a las vacas de una manera muy especial, “los resultados están en la calidad y cantidad de leche recibida”, dicen ellos. “Les hablamos y las tratamos con cariño, las alimentamos, las cuidamos y respetamos, y eso, marca una gran diferencia en la producción de nuestras vacas.”
La realidad, es que esto aplica también para los seres humanos en todos los aspectos, como por ejemplo: en nuestra relación de pareja, con nuestros hijos, con nuestros compañeros de trabajo, y con todas las demás relaciones. Mostrar respeto y valor por los demás, hace que los demás tengan un trato reciproco y que se respeten y se valoren más a sí mismos, de esa manera lograran respetar y valorar a los demás y lograran que otros entren en el mismo círculo de respeto y valor. Así es como hacemos la diferencia, y de a poco, logramos un mundo mejor y más saludable.
La autoestima es la imagen y la valoración que uno tiene de sí mismo. Pero la realidad es que las demás personas también influyen sobre la formación de la autoestima de cada uno. Cuando motivamos a nuestra pareja y/o a nuestros hijos a seguir sus objetivos, cuando remarcamos y reconocemos sus logros y sus virtudes, estamos mostrándoles cuánto valen para nosotros y cuánto los amamos. De esta manera inspiramos a nuestros seres queridos a ser mejores personas con los demás y con ellos mismos.
Cuando decidimos darle a los demás, el aliento y la motivación que realmente los haga crecer y sentirse importantes, estaremos elevando el nivel de autoestima personal, y ayudando a las personas a nuestro alrededor a obtener mejores resultados. Cuando las personas nos sentimos motivadas, valoradas, respetadas y amadas, somos felices. Y cuando estamos felices, obtenemos muchos mejores resultados en todos los aspectos de la vida en cuanto a desempeño y eficiencia.
Es muy importante que siempre tengas en cuenta estos pequeños detalles que a lo largo, marcaran una gran diferencia en las personas que amas:
- Ayuda a tus seres queridos a elevar su autoestima, motívalos y ayúdales a que vean sus logros y sus virtudes.
- Demuéstrales tu cariño y afecto, pero también enséñales que ellos también deben quererse.
- Respétalos y ayúdalos a hacerse respetar.
- Se comprensivo/a.
Por último, motívalos a que crezcan y mejoren. El aliento, buen ejemplo y motivación los ayudará a sentirse mejor y a elevar su propia autoestima, así como también los inspirara a alentar y a motivar a otros.
Entonces así, sí podremos decir que nuestras “vacas” estarán felices y, sobre todo, que darán más y mejor “leche”.

¿Y tú, qué estás haciendo para mantener contenta a tu/s vaca/s?

lunes, 9 de febrero de 2015

El Amor Propio


El amor propio es algo que necesitamos alimentar día con día, momento a momento. El amor a nosotros mismos demuestra la afirmación de nuestro ser. Haciendo crecer la seguridad en nosotros mismos, el valor, el respeto y la satisfacción de uno mismo, es como hacemos crecer el amor propio y la autoestima. Es muy importante saber cuáles son tus defectos y debilidades pero también tus cualidades y fortalezas. Cuando nuestro amor propio se debilita, no podemos ofrecer un verdadero amor a otras personas; porque el amor a uno mismo es condición y medida del amor que podemos dar a los demás. Por esto mismo, una de las consecuencias de la falta de amor propio es que no logras relacionarte profundamente con otra persona. Al no saber amarte a ti mismo, no eres capaz de amar a nadie más. El amor propio y la autoestima son elementos importantes para que cualquier persona lleve una vida satisfactoria.
Cuando te amas profundamente, no te permites perderte en pensamientos desagradables que, a la larga, acaban con tu salud física, además del efecto negativo sobre tus emociones. El amor a alguien no lo justifica todo, y definitivamente no justifica que dejes de quererte a ti mismo. Si el amor a otra persona requiere el dejar de amarte, el dejar maltratarte, el no respetarte ni hacerte respetar, el dejar de estar atento a tus necesidades, el dejar de ser tu mismo, el hacerte daño de alguna manera; deberías cuestionarte si ese “amor” realmente te conviene, si ese “amor” es bueno para ti.  Puedes quererlo/a mucho, pero a ti tienes que quererte más, siempre. Amar al otro NO es dejar de amarse a uno mismo.
El hecho de no conocerte a ti mismo implica que no has tenido el valor o el interés necesario para hacerlo.  Cuando pierdes interés por ti mismo probablemente es porque te falta amor propio y valor. Cuando te amas a ti mismo estarás dispuesto/a a saber de ti, a aceptarte y a trabajar para reforzar todo aquello que te hace sentir completo/a, pero también eliminar o cambiar todo lo que te limita.
Cuando eres una persona dispuesta a enfrentar y solucionar tus problemas, no buscas imitar a nadie, eres creativo/a, independiente, amigable; esto demuestra que tienes un amor propio y una autoestima muy positiva y elevada. Pero si no es así, entonces deberás hacer lo cambios necesarios y tomar el control de tu vida, porque sólo así tendrás el poder para alcanzar lo que desees. Los resultados se reflejarán en ti al mostrarte como una persona feliz, positiva y segura.
Es normal que en la búsqueda de uno mismo se cometa errores y se tenga temores. Es muy válido tener miedo y caer, pero más valioso es saber levantarse. Piensa que si al final de cada día de tu vida te sientes orgulloso/a de lo que eres y haces, y además en tu interior hay paz, es porque tus valores y convicciones han intervenido. De lo contrario, los sigues olvidando, continúas haciéndote a un lado y necesitas cambiar eso inmediatamente.
Necesitas darte cuenta de lo especial que eres por amarte a ti mismo más que a los demás. Levántate y confírmatelo, cada día de tu vida. Dite a ti mismo: " Yo valgo mucho", " Yo soy importante", "Estoy orgulloso/a de mí mismo/a, "Tengo la capacidad para...", "Mis virtudes son...". Hazlo, y verás que terminarás por admirarte… y así tendrás mucho mas que les puedes dar a tus seres queridos, tu trabajo, y tu comunidad.

Y tú, ¿qué tanto te quieres?

lunes, 2 de febrero de 2015

Hay que dar el 100% al amor...


En algunas ocasiones, cuando nos dejamos arrastrar por la rutina del día a día, nos olvidamos de la importancia de invertir en la relación de pareja y esto, a la larga, nos pasa factura. Por eso, para que una relación de pareja sea saludable, es necesario dedicarle tiempo, cuidado y dedicación. Es muy importante que cada uno invierta el 100%. Lo importante no es la cantidad de tiempo que empleemos, sino la calidad de él.
En estos tiempos, en los que las parejas dedican más tiempo y energía en conseguir el éxito laboral y económico, en lugar de construir un espacio de amor y contención mutua, es importante tomarse un momento y reflexionar sobre la importancia de invertir en la relación y aprender a reencontrarse, sin otro objetivo más ambicioso que el hecho de estar juntos. El amor es una decisión. Hay que decidir amar y buscar todas las instancias para resucitar y/o mantener la magia y conectarse con la profundidad de ese sentimiento.
Una relación entre dos personas poco a poco transita desde la emoción desbordada del enamoramiento inicial y la novedad hasta la intensidad del amor y la cercanía a través de la inversión que con el tiempo va realizando cada persona. Tu disposición para invertir en la otra persona a través del tiempo va intensificando tu amor. Por eso, es sumamente importante que cada uno invierta el 100%.
Es como cuando compras una tierra, es algo que tú compraste, de acuerdo a la dedicación que tengas en esa tierra son los resultados que vas a obtener, y sí algunas de las plantas que siembras comienzan a secarse tú eres el que decide que hacer, hay personas que no hacen nada y la dejan morir, y por el contrario existen personas que aran la tierra, la fertilizan, la riegan y le invierten mucho tiempo y esfuerzo, hasta que logran que esa pequeña planta se transforme en un gran árbol. Así, sí inviertes lo suficiente, puedes hacer crecer, el romance, el cariño, la sexualidad, la confianza, la comunicación y el amor, todo puede crecer.
Las cosas nunca son estáticas y por eso es que sólo existen parejas que crecen o se deterioran, si tú no inviertes, con el tiempo, te arriesgas a perderlo todo. Por eso tan importante el noviazgo, ya que es una fase de experimentación y aprendizaje, el noviazgo ofrece la oportunidad de compartir una cercanía, de compartir lo que son sus intereses y preferencias. A veces es necesario experimentar varias relaciones para poder encontrar a la persona ideal y poder compartir una relación más duradera. Por eso es muy importante comprender lo que es la inversión, qué tanto invertir, qué invertir y cuándo debes de invertir. Estas cuestiones son básicas para asegurar que tu relación va crecer a lo largo del tiempo.
Es muy importante que sepas como mantener una relación y que la llama se mantenga viva, llena de amor, y que haya entre ustedes confianza y respeto. Todo de una forma recíproca para que así ambos miembros de la pareja estén felices.
Aquí van algunos consejos de cómo invertir en tu relación:
Comuníquense de forma abierta y clara. Llegar a un entendimiento mutuo será una de las herramientas más eficaces en el funcionamiento de la pareja. Sin olvidar que debe ser acorde lo que uno piensa con lo que uno dice para que exista una comunicación eficaz, decir en cada momento lo que uno piensa y no esperar a que sea el otro el que lo adivine, pues si no se lo comunicamos no tendrá forma de saberlo.
Sé detallista. Los detalles son muy importantes. Si estás en una relación y no sabes apreciar los pequeños detalles, lamentablemente tu relación está en este preciso momento yendo costa abajo a una velocidad impresionante; un abrazo, un “te amo”, un “eres especial en mi vida”, son frases que causan efectos extraordinarios y que de alguna manera hacen que la llama del amor no se apague en la relación.
Comparte con tu pareja. Salgan a caminar juntos, o a tomar un helado, o un chocolate caliente, cuando tú compartes tiempo al lado de la persona que diariamente te está brindando su amor, confianza y corazón, le das a entender que es importante para ti y que valoras el hecho de que esté a tu lado.
Haz sentir importante a tu pareja. Trátala/o con dulzura, se paciente. Dile y demuéstrale lo importante que es él/ella en tu vida. Y que mejor manera de demostrarle a tu pareja que vale para ti que invirtiendo tiempo en el/la.
Pedir y saber recibir. Estas serán otras de las habilidades que ayudarán. Es muy importante pedir lo que uno necesita o decir con lo que no se está de acuerdo en el momento en que se necesite y, por otra parte, dejarse cuidar y saber aceptar las críticas constructivas que puede hacer la pareja. Debe darse una reciprocidad en cuanto que son dos los individuos que forman la pareja, ambos deben sentir un equilibrio y que los dos reciben y aportan en condiciones similares.
Toda relación tiene como base una necesidad de fusión y encuentro y esto requiere invertir presencia. Debido a que en la vida diaria, raramente invertimos presencia, es importante crear espacios con el otro para intimar, para trabajar la presencia y, para ello, es necesario invertir tiempo de calidad, sin metas preestablecidas, simplemente ESTAR, porque cada momento invertido es único. Por eso, INVIERTE, y aprovecha cada momento con la persona que amas, antes de que sea demasiado tarde.
¿Te has preguntado que tanto inviertes en tu relación? ¿Cuando y como lo inviertes?